Toronto ha sido refugio de buena parte de esta diáspora que mantienen con pasión sus costumbres, gastronomía y alegría características. En uno de estos eventos que reunieron esta comunidad, tuvimos el gran placer de conocer a uno artistas más destacados de  este país suramericano.

Nacido un 4 de Julio, tuvo su primera incursión cómica a sus cuatro años parodiando a su padre, acto que coincide precisamente con su primer castigo. A los cinco rompe una cortina para hacerse una sotana y disfrazarse de cura, hábitos que cuelga con la aparición de su primera novia a los seis.

Nuestro invitado es Laureano Márquez, quien se declara especialista en carreras inconclusas, no termina Derecho, ni Filosofía ni mucho menos Teología. A duras penas, señala, concluye Ciencias Políticas en la Universidad Central de Venezuela, profesión que abandona para dedicarse a su verdadera pasión: el humor.
En su apretada agenda, nos concedió unos minutos para contarnos una visión, que describe con gran exactitud, de quienes viven fuera de Venezuela aquellos que continúan en su tierra. Nos habló de su país, Latinoamérica y sus similitudes, especialmente cuando dice:
“Nuestros gobiernos son más o menos eficientes, nuestras leyes son igualmente violadas, las instituciones suelen ser del mismo tenor de debilidad unas con otras, de modo que tenemos una raíz común que es ser hijos de ese conquistador Español, que pasó por encima del triángulo de las bermudas y como dijo Enrique Pinti, el humorista Argentino, el triángulo no se los chupo y hacernos ese favor para que llegaran los ingleses y entonces los españoles habrían llegado a Toronto y los ingleses a Suramérica y nosotros estaríamos desarrollados y aquí  pasando trabajo parejo”.

La carrera humorística de Laureano le ha permitido viajar por muchos países en el mundo, en especial los Latinoamericanos. Autor de tres libros de humor: Se sufre pero se goza; El código bochinche que batió records de ventas y Amorcito corazón que resulta ser un manual dedicado al amor y no un libro dedicado al amor manual, que no es lo mismo.

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Fraces célebre de Laureano Márquez:
El “vivamos callemos y aprovechemos” nos rige.
Quiero que los índices de inseguridad de cada fin de semana no sea culpa de las víctimas.
El humor viene a ser el descubrimiento sorpresivo de que las cosas no son como se pensaba qué eran, porque de alguna manera corre el velo y muestra lo que hay detrás.

Disfrute del video de la entrevista: