“Plasmar en 166 páginas quince años de vivencias, lágrimas, confusión, sufrimiento y búsqueda, donde la soledad era mi única compañía, créeme, no fue fácil” .

“Toda mi vida he cantado, es algo con lo que nací” con esta frase,  la joven Nicolle Jadad Tamer  rompe rápidamente  el hielo de nuestra conversación,  cuando la logro pillar en uno de los descansos de su ajetreada jornada escolar en  el Colegio Marymount de Barranquilla.  Su voz firme y  elocuente, contrasta con sus quince primaveras, pero al oírla hablar con tanta propiedad,  no me queda duda de su pasión por la  música, pasión que la inspiró a componer Overdose of the Heart y  a conquistar  en pocos días  los tres primeros lugares en descargas de iTunes Colombia, en la categoría Rock.

Si Oscar Peterson, ese grandioso pianista canadiense de jazz estuviera vivo y pudiera compartir tan solo unos instantes con José André Montaño, estaría maravillado con la velocidad y precisión que toca el piano este niño boliviano.